viernes, 21 de mayo de 2010

PENTECOSTES La fuerza del amor para los pobres


Concluimos con la fiesta de Pentecostés los 50 días del tiempo de Pascua.
Ingresaremos ahora en el Tiempo Ordinario con la fuerza del amor que nos envía a anunciar a los pobres la liberación y el Reino de paz, libertad y justicia.
En esta Argentina de los 200 años Vivamos el Bicentenario en justicia y solidaridad promoviendo la vida, la familia, la inclusión social, la educación y el trabajo, especialmente de los más necesitados.
Envía, Señor, tu Espíritu sobre nosotros
Y ábrenos a su presencia.
Abre las puertas de nuestro corazón
Para que Él pueda entrar
Cuando quiera y como quiera.
Haznos vigilantes
Para abrir el corazón cuando llame,
Ya sea a la hora primera,
O a la mitad del día
Al atardecer o entrada la noche...
Haznos Señor,
Esperar con fidelidad y constancia
La hora del Espíritu.
Amén
(Álvaro Ginel)

¿Qué es Pentecostés?



La palabra Pentecostés viene del griego y significa el día quincuagésimo. Es decir el día 50
Recuerda los 50 días de la Pascua, anteriormente los judíos celebraban la fiesta de las siete semanas (Ex 34,22), esta fiesta en un principio fue agrícola, pero se convirtió después en recuerdo de la Alianza del Sinaí.

Al principio los cristianos no celebraban esta fiesta. Las primeras alusiones a su celebración se encuentran en escritos de San Irineo, Tertuliano y Orígenes, a fin del siglo II y principio del III. Ya en el siglo IV hay testimonios de que en las grandes Iglesias de Constantinopla, Roma y Milán, así como en la Península Ibérica, se festejaba el último día de la cincuentena pascual.
Con el tiempo se le fue dando mayor importancia a este día, teniendo presente el acontecimiento histórico de la venida del Espíritu Santo sobre María y los Apóstoles (Cf. Hch 2). Gradualmente, se fue formando una fiesta, para la que se preparaban con ayuno y una vigilia solemne, algo parecida a la Pascua.
Se utiliza el color rojo para el altar y las vestiduras del sacerdote; simboliza el fuego del Espíritu Santo.
PENTECOSTES ES LA FIESTA DEL ESPIRITU SANTO EN QUE CELEBRAMOS SU VENIDA SOBRE LOS APOSTOLES Y SU IMPULSO RENOVADOR EN LA MISION DE LA IGLESIA
Los símbolos del Espíritu Santo

Al Espíritu Santo se le representa de diferentes formas:

• El Agua: El simbolismo del agua es significativo de la acción del Espíritu Santo en el Bautismo, ya que el agua se convierte en el signo sacramental del nuevo nacimiento.
• La Unción: Simboliza la fuerza. La unción con el óleo es sinónima del Espíritu Santo. En el sacramento de la Confirmación se unge al confirmado para prepararlo a ser testigo de Cristo.
• El Fuego: Simboliza la energía transformadora de los actos del Espíritu.
• La Nube y la Luz: Símbolos inseparables en las manifestaciones del Espíritu Santo. Así desciende sobre la Virgen María para "cubrirla con su sombra". En el Monte Tabor, en la Transfiguración, el día de la Ascensión; aparece una sombra y una nube.
• El Sello: Es un símbolo cercano al de la unción. Indica el carácter indeleble de la unción del Espíritu en los sacramentos y hablan de la consagración del cristiano.
• La Mano: Mediante la imposición de manos los Apóstoles y ahora los Obispos, trasmiten el "don del Espíritu".
• La Paloma: En el Bautismo de Jesús, el Espíritu Santo aparece en forma de paloma y se posa sobre Él.

Los siete dones del Espíritu Santo

Los dones del Espíritu Santo están tomados del libro de Isaías (is 11, 2-4ª) y nos son dados para la edificación de la Iglesia, es decir que deben ser compartidos en comunión y puestos al servicio de la evangelización especialmente de los más pobres y excluidos.
Podemos entonces, hacer un examen de conciencia personal e invitar a nuestros grupos y comunidades a revisar nuestra vida, a la luz de los dones que hemos recibido y que actualizamos en cada Pentecostés.

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